Impulsar la figura y la obra de Goya a través de la conservación y difusión de la ermita de San Antonio de La Florida, uno de los espacios más singulares de la ciudad desde el punto de vista artístico e histórico, es el objetivo del convenio que han firmado hoy Manuela Carmena, alcaldesa de Madrid; Alfredo Pérez de Armiñan, presidente del Consejo de Administración de Patrimonio Nacional, y Fernando de Terán, director de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando. Las tres entidades suman sus esfuerzos para garantizar el cuidado del monumento y el disfrute por el público de este valioso elemento del patrimonio madrileño.
“Tenemos que felicitarnos por el interés de las tres instituciones en la belleza de un lugar como la ermita de San Antonio de la Florida, y que juntos pongamos en valor una figura como la de Goya. Como podemos ver con las “ángelas” pintadas en estos frescos, gracias a su genialidad Goya fue un adelantado a su tiempo que intuyó cuestiones que ahora son actualidad, como el feminismo o la justicia”, ha explicado la alcaldesa Manuela Carmena. “Conocer la obra de Goya, como toda pieza de arte nos ayuda a desarrollar la ética y la estética, valores fundamentales para ser feliz. Por eso vamos a llevar a cabo diferentes iniciativas para impulsar el conocimiento de su obra en Madrid”, ha añadido.
En nuevo convenio de colaboración, que da continuidad al firmado en 1987, regula las competencias de las tres administraciones y respecto al acuerdo anterior garantiza un reparto más equilibrado de las responsabilidades de conservación de este monumento.
Según el nuevo convenio, la ermita, que forma parte de la Red de Museos municipales, podrá abrir diariamente y celebrar actos culturales acordes al alto valor histórico artístico del templo. Además, la firma del convenio permitirá la renovación de todo el sistema de iluminación tanto interior como exterior. Este esfuerzo en la difusión en torno a la obra y la figura de Francisco de Goya se suma al trabajo realizado desde 2015, año desde el que se viene registrando un aumento constante del público anual a la ermita que en tres años ha aumentado más de 10.000 visitantes.
La ermita fue edificada en el Real Sitio de la Florida por el arquitecto Filippo de la Fontana a instancia del Rey Carlos IV. Su decoración pictórica fue realizada en 1798 por Francisco de Goya, cuyos frescos situados en la cúpula, la bóveda y las pechinas del templo representan un milagro de San Antonio de Padua. Estas pinturas constituyen una obra maestra de la pintura española y universal. A los pies del presbiterio se encuentra, desde 1928, el panteón con los restos mortales del pintor.
En 1905, la ermita fue declarada Monumento Nacional y en 1928 su uso fue cedido a la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, que ya desde 1925 se ocupaba de la conservación de los frescos. Posteriormente, en febrero de 1987, el Consejo de Administración de Patrimonio Nacional acordó la cesión de uso del templo al Ayuntamiento de Madrid, conservando la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando las competencias de asesoramiento en materia de restauración. Desde esta cesión, la ermita se ha integrado en la red de museos municipales de Madrid.