Vivimos una época dorada para todos aquellos que disfrutamos con las series de televisión. ‘Westworld’, ‘Juego de Tronos’, ‘The Walking Dead’, ‘Breaking Bad’, ‘Vikingos’ o ‘Stranger Things’, pero también ‘El Ministerio del Tiempo’, ‘La Casa de Papel’, ‘El tiempo entre costuras’, ‘Fariña’ o ‘Estoy vivo’ llenan nuestras pantallas (de móvil, tableta, ordenador y por supuesto la que domina el salón en muchos de nuestros hogares) de argumentos de altísima calidad, que han fidelizado al espectador hasta cotas que, sólo hace unos años, nos parecían impensables.
Pero, ¿es realmente tan actual nuestro interés por este formato de capítulos entregados al espectador en pequeñas dosis? Sólo tenemos que mirar a nuestro yo del pasado para verlo delante del televisor (Netflix y HBO no eran más que sueños por aquel entonces) y descubrirnos disfrutando de ‘El Equipo A’, ‘El coche fantástico’, ‘V’, ‘Alf’, ‘Corrupción en Miami’, ‘MacGyver’, ‘Se ha escrito un crimen’ o ‘Fama’ e, incluso mirando un poco más atrás, nos encontraríamos viendo ‘Dallas’, ‘La casa de la pradera’, ‘Bonanza’, ‘Colombo’, ‘Embrujada’, ‘Los Ángeles de Charlie’ o ‘Superagente 86’, y podríamos continuar aumentando esta lista de nostalgia mientras buceamos por nuestro pasado.
Esta admiración por todos esos carismáticos personajes nos ha llevado a capturarlos en el papel de forma imperecedera, y es que de eso va esta exposición, de dibujo, de caricatura, esa disciplina tan específica de la ilustración y tan desconocida, en general, por el gran público. Pero… ¿qué es la caricatura? No vamos a intentar aquí hacer un largo ensayo sobre el tema, pero podemos decir que una caricatura es una representación exagerada, con intención humorística, crítica o satírica, reconocible como un sujeto en particular, y justo de personas (ciertamente identificables) está la muestra llena: desde investigadores privados de todo tipo a profesores de química transformados, pasando por habitantes dispares de los Siete Reinos, miembros del ejército norteamericano reconvertidos en soldados de fortuna y tantos otros personajes inolvidables.
Pasen, vean y disfruten de esta particular selección que sirve, además, para tomar contacto con la Asociación Española de Caricaturistas, un colectivo sin ánimo de lucro que surgió en el año 2013 y que pretende dignificar (y hacer accesible) nuestra profesión.