El Bosque Metropolitano de Madrid, el gran anillo verde impulsado por el actual equipo de gobierno y que abrazará Madrid, ya es una realidad tangible con la plantación de nuevo arbolado autóctono en sus diferentes parcelas. Es el caso del área de Butarque, en el distrito de Villaverde, que hoy ha recibido una donación de 1.000 árboles de manos de Sanitas y cuyos ejemplares de mayor tamaño han sido plantados en un acto al que han acudido la vicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacís y el delegado de Desarrollo Urbano, Mariano Fuentes.
Durante el acto, en el que los representantes municipales han estado acompañados por directivos de Sanitas y por Saúl Craviotto, piragüista olímpico y embajador de su proyecto Healthy Cities, que impulsa esta donación, Villacís ha destacado el valor de la “colaboración público-privada” y del compromiso de “las personas y de las entidades” por hacer mejores ciudades. En el caso del Bosque Metropolitano, además, la vicealcaldesa ha señalado que “no sólo está ayudando a construir un Madrid más saludable, sino una ciudad con mayor reequilibrio territorial”, para que “todos los vecinos de la capital, independientemente de dónde vivan, puedan disfrutar de espacios de calidad” y ha enfatizado que “es la primera vez que la ciudad crece con el bosque, como concepto y no a costa de él”, lo que supone, en palabras de Villacís, “un gran punto de inflexión” para la ciudad.
La huella verde de Madrid
La plantación de estos 1000 árboles, de 27 especies autóctonas, ocupa aproximadamente una hectárea de terreno, y supondrá la captura de hasta 102 toneladas de CO2 en cincuenta años. Cuando el Bosque Metropolitano esté culminado, en una década aproximadamente, absorberá hasta 170.000 toneladas de CO2.
Hasta la fecha, se han plantado ya más de 130.000 ejemplares de árboles y arbustos, se ha intervenido en aproximadamente 66 hectáreas de terreno, de las que 16 ya están abiertas para uso y disfrute del público y se han invertido ya 31,7 millones en plantaciones, las últimas, realizadas en la parcela de Vicálvaro este pasado fin de semana.
En concreto, en la parcela de Butarque, un área muy importante para el reequilibrio territorial de la ciudad, se han invertido 1,9 millones en la obra de movimientos de tierra y canalizaciones, tras las cuales, ya puede comenzar la plantación. La intervención concreta en la parcela ascenderá a cerca de 3 millones de euros, que redundarán en una mejora en la calidad del aire, en un beneficio para la salud de todos los madrileños y en paliar los efectos del cambio climático.