Madrileño de pura cepa, tanto que nació en el mismísimo Museo del Prado, Tony Leblanc dará nombre al pasaje situado entre las calles de la Beneficencia y San Mateo, en el distrito de Centro. Así lo ha acordado el Pleno del distrito, celebrado en la tarde de hoy, con el apoyo unánime de los grupos políticos. Como explicó el concejal del distrito, José Fernández, la Junta Municipal de Centro prosigue con su empeño de homenajear a aquellas personas que “por su especial significación, han contribuido de una manera u otra a hacer algo especial para nuestra ciudad o nuestro país, dando su nombre a calles o equipamientos de nuestro distrito”.
Ignacio Fernández Sánchez nació en 1922, en el mismísimo Museo del Prado, donde su padre trabajó primero como vigilante nocturno, posteriormente como conserje. En esta ciudad desarrolló casi toda su carrera profesional que le convertiría, como ha subrayado Fernández, en “uno de los mejores embajadores de nuestro cine y nuestra tierra”. El próximo mes de noviembre se cumplirán diez años de su fallecimiento.
Su apellido artístico lo adoptó añadiendo el ‘Le’ al segundo apellido paterno, Blanc. Con él se convertiría en uno de los actores más y populares del cine y de la pequeña pantalla, además de humorista, director, guionista e, incluso, compositor de pasodobles. A lo largo de su dilatada carrera atesoró numerosos reconocimientos y distinciones como los dos Goya (1993 y 1998), varias Medallas de Oro al Mérito en el Trabajo y en las Bellas Artes, además de la Gran Cruz de la Orden del Dos de Mayo. Ahora deja su huella en el callejero de su ciudad. “Hoy queremos que un espacio de nuestro distrito lleve su nombre y podamos recordarle siempre, porque personas de su talla, con una representatividad tan clara de nuestra ciudad merecen estar no solo en nuestros corazones. Como decía Santiago Segura, Tony Leblanc solo debería morirse en las películas”, subrayó Fernández.