Los tratados comerciales, conocidos como TTIP (acuerdo UE- Estados Unidos) y CETA (acuerdo UE-Canadá) darían un poder sin precedentes a las empresas multinacionales y por lo tanto amenazan con anular la democracia y el Estado de Derecho, así como perjudicar la protección del medio ambiente y de los consumidores. Los tratados permitirían que las compañías inversoras demandasen a los gobiernos ante tribunales de arbitraje privados si consideraran sus intereses empresariales perjudicados por leyes o políticas.
STOP TTIP ha recogido más de un millón de firmas en un tiempo récord, apenas dos meses, pese a la falta de transparencia de la Comisión Europea en las negociaciones de ambos tratados. La Comisión además ha obstaculizado la recogida de firmas.
A mediados de julio, la coalición STOP TTIP solicitó el registro de una Iniciativa Ciudadana Europea (ICE) exigiendo que la Comisión Europea detuviera las negociaciones sobre el TTIP y no concluyera el CETA. De acuerdo con las normas de la Unión Europea, una iniciativa ciudadana de más de un millón de firmas puede obligar a la Comisión Europea a que revise una política y a celebrar una audiencia en el Parlamento Europeo. Sin embargo, a principios de septiembre, la Comisión Europea se negó a registrar el ECI alegando que no era admisible.
STOP TTIP reaccionó impulsando una versión auto-organizada de la ECI y denunciando la decisión de la Comisión Europea en el Tribunal Europeo de Justicia. El objetivo de la campaña es cumplir los requisitos oficiales de la ECI, es decir, alcanzar el millón de apoyos y lograr un mínimo de firmas en al menos siete países miembros. Ese mínimo, llamado quorum, ha sido sobrepasado con creces en seis países. En el caso del Estado español, el número de firmas aumenta rápidamente y ya se ha superado el 61%.
«La Unión Europea está tratando desesperadamente de sofocar la participación de los ciudadanos y evitar un debate crítico sobre estos acuerdos comerciales. No aceptamos esto. TTIP y CETA amenazan la democracia, los derechos laborales, las normas ambientales y los servicios públicos esenciales. Los ciudadanos quieren tener algo que decir en esto y deberían hacerlo! Un millón ya han dicho «No, gracias!» ¿Cuántos más se necesitan para que Bruselas los escuche? «, asegura Susan George, miembro del Comité de Ciuddanos STOP TTIP:
STOP TTIP intensificará las protestas en los próximos meses. La recogida de firmas continuará y será acompañada por acciones creativas y manifestaciones. La primera de ellas tendrá lugar en Bruselas el 9 de diciembre, para felicitar irónicamente el 60 cumpleaños del presidente de la Comisión Jean-Claude Juncker.
John Hilary añade: «Vamos a entregar un regalo especial a Jean-Claude Juncker en su cumpleaños: Una tarjeta de cumpleaños gigante firmada por un millón de europeos. Los políticos siempre están llamando a los ciudadanos a que participen activamente en la política europea, y aquí hay más de un millón de personas que han hecho precisamente eso. En su 60 cumpleaños, Juncker debe soplar las velas de estos acuerdos comerciales masivamente impopulares y antidemocráticos a los que se están oponiendo los ciudadanos en toda Europa. Un millón de firmas es sólo el comienzo. Continuaremos nuestra protesta hasta que el TTIP y el CETA sean historia».