El Ayuntamiento ha publicado una nueva convocatoria para autorizar el uso gratuito de parcelas municipales para su utilización como huerto urbano a asociaciones sin ánimo de lucro, con el fin de satisfacer, entre otras, funciones ambientales, sociales-comunitarias, educativas, saludables, de identidad y sentido de pertenencia de los vecinos y vecinas con el barrio, y paisajísticas. En concreto se pondrán a disposición de los vecinos 32.625 metros cuadrados distribuidos en 27 parcelas de 16 distritos.
El Área de Medio Ambiente y Movilidad del Ayuntamiento de Madrid desarrolla diversos programas de impulso a la horticultura urbana con fines agroecológicos para hacer de Madrid una ciudad más sostenible. El Programa municipal de huertos urbanos comunitarios se inició en 2014 con 17, a los que se sumaron ocho nuevos huertos en 2016.
Actualmente se está mejorando el acondicionamiento de 9 huertos ya existentes en parcelas vacantes de suelo dotacional, se han instalado 5 nuevos y se ha proyectado el acondicionamiento de 11 parcelas en zonas verdes para el desarrollo de nuevos proyectos de huertos urbanos comunitarios, todos ellos incluidos en esta convocatoria de cesión de parcelas. Finalmente se incluyen también dos huertos, en Hortaleza y Villa de Vallecas, que ya fueron objeto de cesión en anteriores convocatorias. Con ello, en breve plazo, Madrid contará con más de medio centenar de huertos urbanos distribuidos en todos los distritos.
Los objetivos de estos huertos urbanos son muy variados, más allá de sus beneficios ambientales, de la actividad agrícola que en ellos se desarrolla, y de ser espacios que permiten a la ciudadanía el contacto con la naturaleza. Los huertos, además, se constituyen en una herramienta para educar en la sostenibilidad, facilitar lazos intergeneracionales y desarrollar proyectos inclusivos y de convivencia. En este Programa juegan un papel protagonista las asociaciones vecinales y culturales, asociaciones de padres y madres de centros escolares, organizaciones no gubernamentales y otras entidades ciudadanas que gestionan estos huertos urbanos comunitarios, en una experiencia pionera de gestión compartida del espacio público.
Estos huertos se convierten así en espacios de educación ambiental desde los vecinos y para los vecinos, donde los ciudadanos participan activamente en el proceso de naturalización urbana. Además, desarrollan actividades para otros colectivos como escolares de los centros educativos de su entorno, centros de salud mental o centros de mayores.
Agroecología
Los proyectos de horticultura urbana, además de suponer una mejora del paisaje urbano, deberán adoptar las medidas precisas para evitar molestias innecesarias y asegurar la adecuada convivencia con el vecindario. El cultivo del huerto se deberá realizar bajo premisas agroecológicas, sin uso de fitosanitarios, insecticidas ni abonos de síntesis química y realizando un uso eficiente del agua. Los residuos procedentes de restos vegetales generados en los huertos deberán ser compostados in situ.